La situación en Venezuela sigue siendo asfixiante. El Gobierno podrá maquillar los datos de la manera que mejor le convenga, pero es obvio que el país sigue sumido en una crisis brutal, con falta de existencias en muchas tiendas y comercios, con el trabajo en mínimos y una inflación que devora los recursos de cualquier familia. Son muchos los venezolanos que han decidido abandonar el país en busca de una vida digna, ya sea en España, uno de los lugares favoritos para los emigrantes, o en naciones más cercanas, como Colombia. La frontera entre ambos países está cada vez más restringida, y es que el éxodo de venezolanos al país vecino ya ha empezado a afectar a la economía colombiana, tanto para bien como para mal. Aun estando en una situación de privilegio si la comparamos con la de Venezuela, Colombia tampoco tiene una economía para tirar cohetes. Es así que esta inmigración tan cercana puede conllevar ciertos problemas para los propios colombianos.
Los controles son cada vez más exhaustivos, y está claro que en Colombia ya no ven con tan buenos ojos la llegada de venezolanos a su país. En una situación normal, los colombianos también cruzarían la frontera en busca de mejores oportunidades, pero Venezuela no es plato de buen gusto para nadie que no haya nacido allí. Es una realidad dura, pero hay que ser cien por cien sinceros en este sentido. Es por eso que la llegada de miles de personas desde Venezuela puede acabar afectando de manera notable al mercado laboral en Colombia. El sector del sexo de pago es uno de los que más se está resintiendo en este sentido, puesto que muchas de las mujeres venezolanas que llegan a territorio parcero son prostitutas. Tanto es así que incluso han llegado a equipararse casi a las propias colombianas en su país, siendo 1 de cada tres prostitutas de origen venezolano. ¿Cómo es la realidad de estas mujeres en un país que no es el suyo y teniendo que realizar estos servicios? En este artículo queremos ahondar un poco más en este asunto, analizando a fondo el problema y buscando posibles soluciones.